Seminario extraordinario.
Presentación de resultados de tesis
Director: Dr. Gustavo Arnaud Franco (CIBNOR)
México ocupa el segundo lugar en cuanto a número de reptiles con 830 especies. Dentro de este grupo de vertebrados se encuentran las serpientes pertenecientes a la sub-familia Crotalinae, donde se incluyen las víboras de cascabel (Crotalus y Sistrurus). México cuenta con 32 (88%) especies dentro del género Crotalus, de las 36 especies descritas hasta el momento, con su mayor diversidad en la altiplanicie mexicana y el eje neovolcánico, lo cual sugiere a esta región como el lugar donde se originó y diversificó dicho género. En el noroeste de México se distribuyen 15 especies de cascabel tanto en la Península de Baja California e islas en el Mar de Cortés y Pacífico Mexicano. Una de ellas es Crotalus enyo, que se distribuye en la mayor parte de la Península de Baja California, y se encuentra en la categoría de amenazada (A) en la NOM-059-SEMARNAT-2010. A pesar de esto, es poco lo que se conoce sobre la historia natural de ésta especie.
México ocupa el segundo lugar en cuanto a número de reptiles con 830 especies. Dentro de este grupo de vertebrados se encuentran las serpientes pertenecientes a la sub-familia Crotalinae, donde se incluyen las víboras de cascabel (Crotalus y Sistrurus). México cuenta con 32 (88%) especies dentro del género Crotalus, de las 36 especies descritas hasta el momento, con su mayor diversidad en la altiplanicie mexicana y el eje neovolcánico, lo cual sugiere a esta región como el lugar donde se originó y diversificó dicho género. En el noroeste de México se distribuyen 15 especies de cascabel tanto en la Península de Baja California e islas en el Mar de Cortés y Pacífico Mexicano. Una de ellas es Crotalus enyo, que se distribuye en la mayor parte de la Península de Baja California, y se encuentra en la categoría de amenazada (A) en la NOM-059-SEMARNAT-2010. A pesar de esto, es poco lo que se conoce sobre la historia natural de ésta especie.
Con el fin de
determinar el uso de hábitat de C. enyo
en la región del Cabo, el presente estudio tuvo como objetivos determinar la
abundancia, el patrón de actividad durante el año y caracterizar los hábitats
utilizados por C. enyo. Para ello
entre 2010-2012 se realizaron muestreos diurnos y nocturnos a pie y transectos
nocturnos en vehículo, en los sitios con distribución potencial y mayor número
de registros históricos.
Durante el
estudio se observaron 21 ejemplares adultos, 16 de los cuales se encontraron
atropellados. Se observó que C. enyo
presenta un patrón de abundancia con un incremento en la estación de lluvias,
con diferencia significativa entre estaciones.
Es una especie principalmente nocturna, siendo las 20:04 la hora
promedio de actividad. No se observaron cópulas, hembras grávidas, juveniles ni
neonatos.
El mayor número de
registros de la especie se obtuvieron entre los 400-499 msnm en la selva seca.
En cuanto al uso de hábitat, a C. enyo
se le encontró en mayor proporción en arbustos, seguido por el suelo desnudo,
cobertura arbórea, materia vegetal en descomposición, herbáceas, suculentas,
rocas y pendientes con 14.8 % de inclinación. No existe diferencia
significativa en el uso de hábitat entre hembras y machos, entre sitios de
captura (matorral – selva), ni entre ejemplares recién alimentados y no
alimentados.